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NIDO.

Vereda Literaria

Los nidos son creaciones de las aves ramita por ramita. Con mucha curiosidad y cuidado los pájaros arman un lugar donde se va a gestar la vida. Los nidos también se vuelven casa, lugar de la juntanza.


Nido, vereda literaria, es una propuesta que nace en Santa Bárbara, Antioquia y de la que te invitamos a hacer parte. 


Nido es una palabra que nos acoge, así como en algún momento nos han cobijado los libros. Los libros pueden ser vistos de múltiples maneras: refugio, encuentro, sueño, posibilidad, enseñanza. Los libros nos han hecho como personas. También

hemos creado libros muchas veces porque sabemos de su infinita posibilidad de cautivar a las personas. Por la fuerza que nos han dado los libros, queremos continuar su onda expansiva y compartir su poder en las veredas de Santa Bárbara.


El nido del libro es una iniciativa de biblioteca comunitaria creada por personas que creemos en los libros, la lectura y su fomento como herramienta para el desarrollo personal y colectivo. También es una apuesta colectiva para hacer posible otras conversaciones en el área rural.


Los nidos, veredas literarias, estarán ubicados en comunidades rurales cafeteras, cerca a Medellín, pero con acceso limitado a otras formas de cultura, específicamente a los libros. 


3 nidos

Iniciaremos con tres nodos en las escuelas de las veredas Morro Plancho, Las Mercedes y La Arcadia. Cada escuela contará un nido que contiene libros leídos y nuevos que pueden ser tomados por las personas de acuerdo a sus gustos. Los libros igual que la experiencia de Medellín son libros rodantes que van y vuelven. No tienen un tiempo de lectura ni mínimo; las personas pueden estar con él el tiempo que deseen, la invitación es que una vez leído lo devuelvan para que llegue a otras personas. Rotarlos hace parte fundamental de la idea. No hay nada más fascinante que leer libros recomendados y después comentarlos entre amigos.


Propiciar la confianza es parte también de esta idea. Creemos en las personas que en su esencia cuidan. Los libros que habitarán estos Nidos son parte del patrimonio de todos, por eso promoveremos el cuidado entre esta red.


¿Cómo fomentar la lectura entre estudiantes y comunidad educativa?


Además de los Nidos que estarán ubicados en las escuelas, desarrollaremos las siguientes estrategias.


-Adopta un autor. Replicando la idea de la Fiesta del Libro de Medellín, las instituciones educativas adoptarán un autor, esto quiere decir que durante un mes leerán el libro y trabajarán de diversas maneras los temas propuestos por el escritor.


El escritor visitará la escuela y con los estudiantes realizará un taller de escritura creativa.


Intercambio virtual con bibliotecas juveniles en Colombia y otros países. Realizaremos conversaciones virtuales entre bibliotecas, iniciaremos con la biblioteca Girasol de NIcaragua para compartir las experiencias y aprender a partir de la experiencia de otros.


En el crowdfunding se recogerán saberes y recursos que las personas quieran compartir con las familias rurales de las 3 veredas, con el propósito de reforzar el encuentro.


#nidoveredaliteraria

#littlelibrary

#cafecitohechoconmuchoamor

700+ árboles nativos sembrados

Llegamos a la vereda Morro-Plancho en Santa Bárbara, en la ladera oriental del Río Cauca. Empinada puede ser una palabra que le queda corta a esta montaña característica de un cañón en Colombia. Los cafetales con su verde intenso llamaron nuestra atención; también unos eucaliptos dispersos y aporreados por el viento.


En ese momento surgieron los verbos: regenerar y reparar un suelo desgastado con fuerza por el monocultivo intensivo. son propósitos para trabajar como colectivo. La paciencia también salió a flote, es necesario hacer un trabajo dedicado de conversación con la naturaleza a donde estamos llegando.


De ahí surge la iniciativa: Hacer bosque como una posibilidad de pasar a la acción. Queremos ver oportunidades donde muchas veces solo se ven problemas. Nos dimos a la tarea y en octubre del 2022 iniciamos la siembra, un año después llevamos más de 700 árboles nativos sembrados.


Ahora hacemos esta invitación a una comunidad más amplia, los invitamos a que hagamos de esta ladera un bosque colectivo y con este esfuerzo común, regenerar suelos, ampliar reductos de bosque húmedo tropical, hábitat de especies viajeras y nativas.


Regala un árbol


Te invitamos a hacer parte de esta iniciativa de creación de un bosque colectivo. Los árboles elegidos se caracterizan por su capacidad de reparar suelos degradados y en riesgo de erosión. Son de crecimiento rápido y son resistentes al tipo de terreno de ladera en donde se encontrará nuestro bosque. Son árboles a los que les gusta el agua y la fauna silvestre.


Puedes regalar árboles que están en peligro crítico de extinción, árboles protectores, árboles que regalan alimentos a animales y al suelo, árboles que regalan belleza. Cada uno de los árboles fue asociado a un atributo, una palabra, que puede hacer parte de tu regalo.


Magnolio molinillo (Magnolio hernadezii). Aventura

Caunce (Godoya antioqueñensi). Resiliencia

Nogal cafetero (Cordia alliodora). Bálsamo

Guayacán rosado (Tabebuia rosea).  Contemplación

Yarumo (Cecropia peltata). Abrecaminos

Cámbulo (Erythrina poeppigiana). Reinvención

Pino Romerón (Podocarpus aleifolius). Protección

Cacao (Theobroma cacao). Alegría

Guanábana (Annona muricata). Abundancia

Guamo (Inga alba). Juego



¿Qué incluye el regalo Hacer Bosque?

Un árbol nativo sembrado y cuidado por 5 años (etapa crítica de crecimiento).


Cuadro con ilustración botánica del árbol nativo elegido

Certificado de siembra y descripción del árbol y su importancia para la biodiversidad

Placa cerámica en el árbol que menciona la especie sembrada, la persona o institución que lo regalo y la persona o institución que lo recibió

Georeferenciación en la plataforma Plant for The Planet. Con este proyecto también nos sumamos a su meta de sembrar un trillón de árboles.


#hacerbosque

#cafecitohechoconmuchoamor

Bajo la sombra de un mango

Llegamos al aeropuerto Olaya Herrera para hacer un viaje, pero no en avión. Estamos 8 mujeres frente a una señora, vigilante, uniforme azul, pelo amarillo, ceño fruncido y muchas ganas de responder no a todas nuestras preguntas. Mientras esperamos paradas, en la fila, escucho conversaciones espontáneas, caras hundidas en el celular. El cielo está completamente azul y el cemento es brillante. Qué por aquí no, qué por allí sí. Queríamos entrar, pero hoy no se pudo. Caro, dice: improvisemos.

Bajo el azul eterno, se ve el mango verde oscuro y su sombra. Sobre todo su sombra.

Nos sentamos en unas escaleras hechas de adoquín naranja y cemento. Parecemos sentadas para ver un partido de fútbol, pero el tema era otro. Jung, causalidad, física, serendipia, muerte, respiración, decisión, responsabilidad, movimiento, conexión. Madre. Madre tierra, madre muerta, madre herida.

Yo estoy moliendo el café y las palabras entran en las fresas de titanio y hacen eco con los granos de café que estoy moliendo para estas 8 mujeres. Apenas las conozco y siento un vínculo inexplicable con ellas. El aguita remoja el café mientras las ideas flotan bajo la sombra protectora de este mango. Recuerdo una bella frase de la Tokarczuk: “por un momento, el sol se deja ver entre las nubes, todo adquiere tal profundidad que podríamos llorar”.

Café oscuro, más verde, más naranja, más los colores que salen de ellas, hacen de este momento una sinfonía.


#elcafecomoritual

#cafecitohechoconmuchoamor


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